¿Quién a estas alturas no ha escuchado himnos como "Paradise City" o la más que trillada "Sweet child o´mine"? Creo que todo el mundo sabe quién es W.Axl Rose o Slash... así que poco tendremos que explicar de esta gran banda estadounidense (de Lafayette, Indiana, para más datos) que revolucionó el mundo del metal con este su segundo trabajo. Es uno de esos álbumes "atemporales", cuya escucha se hace agradable por más años que hayan pasado desde su publicación ypor muy mal que te puedan caer los miembros de la banda, auténticas estrellas mediáticas amantes de los excesos y las polémicas más variadas. Gran trabajo a la guitarra de Slash, una voz peculiar, pero muy potente y característica como es la de Axl y unos temas amenos y muy currados son la base de este auténtico clásico con mayúsculas del rock y metal. Lástima que a partir del año 92 la estrella de la banda se fuera apagando progresivamente hasta llegar a su disolución... y desde entonces tenemos al baterista por un lado (Steven Adler´s Appetite), al grueso de la banda por otro (Velvet Revolver) y a Axl Rose en solitario... bueno, ellos mismos. Al menos nos quedan sus discos como consuelo, ¿verdad?Estilo: Hard rock / Heavy metal
Año de publicación: 1989
Dicográfica: Geffen
Canción recomendada: Nightrain
Valoración: 9,5/10
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