martes, 19 de diciembre de 2006

2ª sesión de patinaje artístico neuronal

Sí, soy yo de nuevo. No han pasado ni 24 horas desde ayer (es lo que tiene que fuera "ayer" cuando inicié mi andadura (mira, como lo que me pide mi novia cuando cohabitamos en el lecho conyugal, "anda, dura"... y no es una expresión de sorpresa al notar el miembro, sino una petición que me hace... je) en esto del mundo de internet) y ya vuelvo a estar aquí sumido en la confusión y el pasmo más absolutos. A ver si esto va a ser una droga y me voy a enganchar... que yo soy un tipo muy fácilmente influenciable y no es plan... Bueno, el que no arriesga no gana, así que por el momento seguiremos adelante con esto del diario digital, que me ha gustado "perder mi tiempo" frente al ordenador. Mi tiempo y mi vista, porque esto de los píxeles seguro que no es bueno para mi ya de por sí machacada retina y todos los demás elementos que componen mis ojitos. En fin, seré un valiente, je. De momento en estos mundillos de internet sigo más perdido que Marco en el día de la madre, como decía Flo en aquellos años del Mississippi... qué gran programa, ¿no? Igual hoy en día no pensaría igual si lo viera, pero allá a finales de los 90 me parecía muy divertido. ¿Acaso cambiamos tanto con la edad...? No lo sé, pero recuerdo haber visto la peli "Airbag" en el cine y pensar "¡uau, qué peliculón!" y al verla dos años después en la TV haberme echado las manos a la cara en señal de "tierra, trágame, ¿cómo pudo gustarme este bodrio? ¿Es que me había metido 3 litros de cerveza en vena aquella noche?". Es más, sé que le recomendé a gente dentro de mi círculo de amistades que fuera a verla. ¿Será por este motivo que hace años que nadie me consulta mi opinión de crítico de cine a la hora de elegir tal o cual película de la cartelera? Hum... puede que sí. Aunque, pensándolo bien, incluso mi mejor amigo me la dio con queso un día cuando me dijo que no me podía perder la "genial película" de "Astérix y Obélix:Operación Cleopatra", pues él había ido incluso dos veces al cine para verla de buena que era... Madre mia, yo fui con la que por aquel entonces era mi novia y se nos quedó tal cara de bobalicones en la sala de proyecciones que creo que aún me dura y sigo en estado de shock desde aquel momento. Berni, tio, te voy a demandar por los daños y perjuicios morales e incluso físicos que tu recomendación me provocó, que lo sepas... Total, que para gustos colores, ¿verdad?
Lo que estaba comentando era mi total desconocimiento del medio en el que me muevo en estos instantes, pues no sé muy bien de qué forma organizar los textos para que no sea todo un batiburrillo sin "Tom" ni "Son"... ("un lio sin Tomás e hijo" para la versión más castellanizada de la expresión (= "dícese cuando se pincha un neumático")) y uno pueda navegar entre las distintas secciones del blog como si fuera el patrón del BMW Oracle... esperad, ¿ese es de los buenos en la America´s Cup (que también hay que ser cutre para mover tanta pasta y llamarse "la taza de América", ¿eh?) o he elegido a un equipo de esos mediocres? Bueno, digamos que del "Alinghi", que ese es el actual campeón, ¿verdad? Joder, si es que estoy muy puesto en vela... de hecho hay noches que las paso así a modo de homenaje, je... (el último "je" era de risa y no el eco de la palabra anterior, que conste)). Voy a ir toqueteando las diferentes "portero del Real Madrid" que tengo por ahí repartidas y a ver si poco a poco me voy cogiendo, que de momento estoy muy verde... A ver si alguien experto en el tema "blog" me asesora, que esto de ser autodidacta tiene sus complicaciones para alguien que hasta el momento se comunicaba con el mundo exterior con un boli "Bic" ("cristal", para más datos) y una hoja de papel cuadriculado... claro, como soy alemán elijo un papel a mi imagen y semejanza, hay que entenderlo. Pues eso, abandono esta segunda sesión con el firme propósito de mejorar en el diseño y los contenidos que tengo en mente publicar y difundir... como lo que hace el queso cuando lo pones encima de una loncha de solomillo en la sartén... mmm... ¡pero qué hambreeeee! Hale, me despido de mí mismo, que el estómago me llama. Tschüssi.

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