Siempre he sido una persona muy tolerante, pero hay cosas que me parecen realmente escandalosas. A ver, quiero decir que a mí la libertad de expresión me parece realmente un derecho que hemos de proteger y que el hecho de prohibir ciertas conductas y censurar artículos (como sucede, por ejemplo, en Alemania, con todo tipo de propaganda, música y demás temática neonazi) no hace a veces sino hacerlos parecer más interesantes para el potencial consumidor por el mero hecho de estar haciendo algo "prohibido" y "castigado por la ley", pero de ahí a potenciar el consumo de estos productos va un trecho muuuuy largo. ¿Por qué digo esto? Muy sencillo. Últimamente proliferan en la ciudad de Valencia una serie de anuncios, ya sea en prensa escrita o simplemente en andamios o propaganda de esta que te dejan en el coche, en los que se puede leer "pintamos fachadas". ¿Pero esto qué es, vamos a ver? ¿Le voy a pagar yo a un tipo para que luego escriba cosas del tipo "moros fuera", "muerte a los negros" o "hammerskins Llevant UE"? No, no, no, de eso nada... se puede ser muy tolerante, pero pagar a la gente para que haga esta clase de barrabasada me parece ilógico y fuera de lugar... ¿Qué pasa...? Ah, ¿que no se refieren a esa clase de "fachadas"? Ups, pues perdonen ustedes, ¿eh? Pensaba... jeje.
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