Mordred son un multirracial grupo californiano de seis componentes que surgió a finales de la década de los ochenta dejándonos varios álbumes y EPs a lo largo de la primera mitad de la década de los noventa, siendo este trabajo el mejor (a mi modo de ver) de todos ellos. Influenciados claramente por bandas que mezclaban metal con partes rapeadas (Biohazard, Shootyz Groove, Beastie Boys o algunos temas de los neoyorquinos Anthrax, por ejemplo), su principal carcaterística es precisamente esa mezcla entre las sonoridades thrash de sus paisanos de la Bay Area de San Francisco con hip-hop y la inclusión de un DJ. La voz de su cantante puede no ser del gusto de todo el mundo, pero no se le puede negar su particularidad... a veces se queda a medio camino entre los quejidos agónicos de un Tom G.Warrior de Celtic Frost y un Dave Mustaine desganado que no se ha levantado con ganas de cantar sus temas... no sé, curioso al menos sí es, jeje. Para amantes de los discos con predominio del sonido del bajo, gente que flipe con Faith No More y personas de mente abierta... musicalmente es genial, las letras son críticas atemporales contra la sociedad que nos rodea y todos los miembros de la banda merecen altas calificaciones cuano se trata de evaluar su labor... aunque mención especial merece la base rítmica, por supuesto. Tres cuartos de hora que espero no dejen indiferente a nadie. Un clásico dentro de su estilo.- Estilo: Funk/Metal
- Año de publicación: 1991
- Discográfica: Noise
- Canción recomendada: Falling away
- Valoración: 9,5/10
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